El 8 de septiembre el equipo de investigación de criptomonedas de Standard Chartered proyectó que el precio de bitcoin podría alcanzar los $100.000 en los últimos días de 2021 o en los primeros meses de 2022. Algunos CEOs del segmento cripto también han hecho predicciones similares, al igual que Thomas Lee, socio gerente de Fundstrat Global Advisors.
Sin embargo, más allá de una ruptura momentánea por encima de los $50.000 en la primera semana de septiembre, bitcoin no ha logrado generar ningún impulso alcista. Al cierre de esta edición, su precio se encuentra en torno a $41.698, oscilando entre el soporte de $41.000 y el nivel de resistencia cercano a $50.000. Entonces, ¿qué está causando esta presión a la baja?
1. DeFi continúa creciendo exponencialmente
El tema se remonta al año pasado. Durante la mayor parte de 2020 el sector de las finanzas descentralizadas (DeFi) registró un volumen de operaciones sin precedentes y vio a miles de usuarios de criptomonedas ubicar sus activos en múltiples protocolos DeFi con el fin de generar rendimientos de alto interés. Cabía esperar, consecuentemente, que muchos inversores convirtieran sus tenencias de bitcoin en ether u otros tokens respaldados por contratos inteligentes para participar de esa moda.
Aunque hubo una caída momentánea en las actividades relacionadas con DeFi en la última parte de 2020 y a principios de 2021, el sector experimentó una segunda ola de inversión en los últimos meses, ya que los tokens no fungibles (NFTs, por sus siglas en inglés) comenzaron a ganar protagonismo. El 7 de septiembre el valor total de los activos bloqueados (TVL) en DeFi casi superó el hito de $100.000 millones por primera vez, según DeFi Pulse. Este último aumento ya ha superado al crecimiento de 2020, ya que este año el TVL se disparó 253% —pasando de $23.800 millones a $84.100 millones— frente al aumento de 183% el año pasado (de $8.390 millones a $23.800 millones).
Gran parte de este nuevo crecimiento se debe a la llegada de nuevos competidores en el espacio de las aplicaciones descentralizadas (dapps), entre los que se encuentran:
- Solana
- Avalancha
- Fantom
- Cardano
Cada una de estas plataformas centradas en contratos inteligentes ya ha establecido sus propios ecosistemas DeFi de dapps nativas y pregonan tarifas más baratas y velocidades de transacción más rápidas que la actual tecnología blockchain de Ethereum.
2. El boom de los NFTs
No es sólo DeFi lo que está robando protagonismo a bitcoin. El mercado de NFTs también ha tenido un éxito importante en 2021. La cantidad gastada para comprar NFTs a lo largo de un período de 30 días ha aumentado drásticamente, de alrededor de $10 millones a principios de 2021 a aproximadamente $2.600 millones a partir del 17 de septiembre.
Debido al ascenso de DeFi y los NFTs, el dominio de bitcoin —el porcentaje total de la capitalización de mercado de esa criptomoneda en relación con la capitalización del mercado total de criptomonedas— ha caído significativamente: era de 69,7% a principios de año pero ahora está en torno a 41,9%. En otras palabras: bitcoin no despierta el mismo interés y atención que hace nueve meses. Esto podría mostrar por qué le ha costado ganar la presión de compra necesaria para superar los $50.000.
3. La presión regulatoria de Estados Unidos
El Senado estadounidense aprobó recientemente el polémico proyecto de ley de infraestructuras. Se trata de un presupuesto de $1200 billones destinado a mejorar diversas áreas de la economía. Parte de la propuesta incluye la modificación del tratamiento impositivo a las criptomonedas, con el propósito de ayudar a pagar este gigantesco gasto. Uno de los cambios consiste en exigir a los brokers de criptomonedas que informen sus transacciones. Aunque el requisito en sí mismo se considera un medio para vigilar a los usuarios de cripto y garantizar un mejor cumplimiento fiscal, la principal razón de conflicto es la falta de una definición clara del término “broker”. Los defensores de las criptomonedas argumentan que el término es demasiado amplio y puede interpretarse de manera que incluya a los mineros de criptomonedas, los desarrolladores y los validadores de nodos, ninguno de los cuales es custodio de los fondos de sus clientes.
Aunque ha habido intentos por parte de un grupo bipartidista de miembros del Congreso favorables a las criptomonedas de enmendar el proyecto de ley, parece poco probable que se pueda hacer mucho para alterar los requisitos de información sobre las criptomonedas antes de que se apruebe como ley. Históricamente, incertidumbres regulatorias como ésta han afectado a menudo al rendimiento de bitcoin.
Además, están las continuas disputas regulatorias entre los reguladores de valores estatales de EE.UU. y las empresas cripto de préstamos, como Celsius y BlockFi. Los reguladores argumentan que las cuentas de ahorro en cripto con intereses que ofrecen ambas compañías violan las leyes estatales de valores.
A nivel federal, la Comisión de Valores y Bolsa (SEC) ha mantenido un enfoque cauteloso sobre las criptomonedas, razón por la cual aún no se ha aprobado un fondo cotizado en bolsa (ETF) de bitcoin en EE.UU. Los analistas creen que la aprobación de un ETF de bitcoin podría estimular un nuevo flujo de interés minorista e institucional hacia bitcoin, el cual podría resultar vital para que alcanzara el valor de $100.000.
Aunque la SEC no parece muy entusiasmada con un ETF de bitcoin anclado en el bitcoin físico, existe una pequeña posibilidad de que considere la aprobación de un ETF de futuros de bitcoin (un ETF que tiene futuros de bitcoin como activo subyacente).
4. El dólar sube
Tras la publicación del informe sobre ventas minoristas de agosto, el dólar subió a un máximo de casi tres semanas el 17 de septiembre. Las ventas minoristas aumentaron 0,7% a pesar de las expectativas de que caerían 0,8%. Estos datos demuestran que la economía estadounidense se encuentra en una tendencia alcista y que las empresas se están acomodando a una nueva realidad de mercado tras los cierres provocados por la pandemia. A pesar del brote de la variante delta del coronavirus, el apetito por gastar no ha disminuido. Por lo tanto, una economía en recuperación significa menos interés en los activos de cobertura económica como bitcoin.
Otro dato económico que podría haber estimulado la deslucida reacción del mercado de bitcoin es la caída de la tasa de inflación estadounidense de 5,4% a 5,3% en agosto. Mientras que algunos creen que esta cifra es alta comparada con las cifras históricas del país, otros la ven como un indicador positivo, teniendo en cuenta que la situación podría haber sido mucho peor.
5. China prohíbe completamente bitcoin por primera vez
El 24 de septiembre, el Banco Popular de China (PBoC, por sus siglas en inglés) emitió una nueva declaración sobre la ilegalidad de las transacciones de criptomonedas y la minería; y añadió que ahora están prohibidas las transacciones de cripto a cripto, así como las de cripto a fiat. Esto significa que prácticamente todas las actividades relacionadas con el comercio de criptomonedas están prohibidas en el país por primera vez, incluyendo la compra, venta o comercio de monedas digitales como bitcoin, ether y tether.
El banco central chino también aclaró que se investigará a cualquier ciudadano que trabaje para exchanges cripto en el extranjero.
Pero no fue sólo el PBoC el que se pronunció sobre las nuevas leyes cripto: la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma (NDRC, por sus siglas en inglés) también expresó su intención de intensificar la aplicación de las medidas enérgicas contra la minería de criptomonedas en el país. En una declaración titulada “Aviso sobre la rectificación de las actividades de minería de monedas virtuales”, los funcionarios establecieron planes para eliminar por completo la minería de criptomonedas en el país.
En primer lugar, se restringirán las nuevas empresas que quieran entrar en la industria minera. En segundo lugar, se ordenará a las autoridades locales que cesen todo apoyo a las operaciones mineras existentes, lo que incluye cortar el suministro directo de electricidad y animar a otros proveedores a aumentar los costes para que las operaciones mineras sean inviables desde el punto de vista financiero. Por último, la NDRC ha dicho que impedirá cualquier nueva inversión en el sector y cortará cualquier servicio financiero restante a las empresas de minería de criptomonedas.
El precio de Bitcoin cayó casi 10% cuando se hizo el anuncio, de $45.099 a $40.693. Pero, desde entonces, los precios se han recuperado alrededor de 8% hasta los $43.890.
Traducido por Andrés Engler.